Dejar de fumar trae beneficios a la salud en el corto, en el mediano y en el largo plazo. Muchos comienzan hasta 20 minutos después de dejar el hábito.
· A los 20 minutos: la presión arterial y el ritmo del pulso bajan a la normalidad
· A las 12 horas: los niveles de monóxido de carbono en sangre bajan a la normalidad
· Desde 2 semanas hasta 3 meses: mejora la circulación y la función pulmonar aumenta
· Desde 1 a 9 meses: la tos y la dificultad para respirar mejoran
· Al año: el riesgo de enfermedad cardíaca se reduce un 50%
· De 2 a 5 años: el riesgo de padecer algún tipo de cáncer disminuye un 50%.
· A los 10 años: el riesgo de morir por cáncer pulmonar se reduce un 50%
· A los 15 años: el riesgo de enfermedad cardíaca coronaria se reduce un 100%
El humo del tabaco afecta tanto al consumidor, como también a las personas que están expuestas al humo ajeno. Cuidá tu salud y la de las personas que te rodean. Dejar de fumar es calidad de vida. Dejar de fumar es posible, el proceso empieza con una decisión.
¡Apagá el cigarrillo y comenzá a disfrutar tu vida plenamente!